¿Sabías que la harina de trigo refinada no es tu única opción para tus recetas? Conoce y enterate de las propiedades de 7 tipos de harinas saludables para reemplazar la harina refinada y comienza un cambio en tu alimentación hoy.
¿Qué es la harina?
La harina es producto de la molienda del cereal y es básica en la despensa de todas las casas. Se utiliza para preparaciones dulces, panificados, repostería, rebozadores, etc.
El consumo de harina y la salud
Los expertos en nutrición recomiendan modificar las preparaciones habituales, optando por harinas más saludables, reemplazando el uso de la harina de trigo refinada.
Esta recomendación se basa en que se asocia el consumo de este producto con el desarrollo de dificultades en salud como la obesidad, patologías cardiovasculares, diabetes.
Harinas saludables
Estas harinas saludables provienen de diferentes orígenes por lo que incorporarlas en la alimentación habitual aportará variedad de nutrientes a nuestro organismo.
También aportan mayor sensación de saciedad y evita que surja el deseo de comer más. Es importante emplearlas en las preparaciones correctas para estos beneficios.
Harina de almendras
Producto de la molienda de almendras, se destaca por el bajo índice glucémico y gran aporte de proteínas, grasas saludables y vitamina E.
La harina de almendras puede utilizarse en repostería y también en panificaciones con menor presencia de carbohidratos. También puede usarse en rebozados.
Se sugiere conservarla sin exposición al aire y en la heladera, ya que puede tornarse rancia con el tiempo.
Harina de castañas
La harina de castañas resulta saludable por su bajo contenido graso y buen aporte de proteínas y carbohidratos complejos. Es una fuente de vitamina C, potasio, manganeso y cobre; tampoco posee gluten.
Se utiliza en preparaciones como la harina de almendras, aunque hay que tener en cuenta que sabor es más potente, también se puede emplear en postres.
Harina de quinoa
La harina de quinoa es rica en proteínas, aminoácidos esenciales y vitaminas. También aporta vitaminas del complejo B y vitamina E, hierro, fósforo, calcio y fibras.
Es buena para utilizar en sopas y salsas (como espesante), elaboración de postres y panadería, bebidas nutritivas, tortillas, crepes.
Harina de centeno
Rica en proteínas, fibra, carbohidratos de absorción lenta, en calcio fósforo, hierro y vitaminas del complejo B; la harina de centeno se utiliza con frecuencia para la elaboración de panes y masas en general.
El tipo de almidón que posee permite una mejor retención de humedad a las masas y le aporta viscosidad.
Harina de garbanzo
Es una fuente de proteínas, fibra, antioxidantes y minerales. La harina de garbanzo posee un bajo nivel glucémico y suele ser utilizada en preparaciones saladas, como rebozador de pescados y al prepararse con agua, se obtiene una consistencia similar al humus. En postres se utiliza en pequeñas cantidades.
Harina de arroz
La harina de arroz proporciona al organismo carbohidratos complejos, minerales y vitaminas, aportando saciedad.
Se utiliza para panes, recetas sin gluten, cereales y es popular en la gastronomía japonesa para fideos y postres típicos.
Harina de coco
La harina de coco es muy popular en dietas keto y low carb. Aporta fibra, antioxidantes, minerales y vitaminas.
El sabor dulce es característico y es muy utilizada en repostería, tartas y preparaciones dulces, pudiendo aprovechar su textura particular.